Esta propuesta fue la ganadora del concurso organizado por Terna, proveedor de energía eléctrica de Italia, en el que se pidió a los participantes diseñar torres de alta tensión de la más alta calidad técnica y estética, con un impacto mínimo sobre el medio ambiente.
La respuesta de la oficina francesa HDA se basa en la transformación de la típica imagen de “soldado industrial” de los postes de alta tensión en una forma elegante, inspirada en la naturaleza.
La competencia planteó esta petición contradictoria: diseñar los postes, una estructura claramente construída por el hombre, mezclada con la naturaleza. Al evaluar esta relación, HDA intentó crear una estructura que se convirtiera en el “símbolo de la compatibilidad y simbiosis del hombre con su entorno y evitar lo contrario”.
Inspirado en la forma de los brotes de una planta joven, los postes de HDA trabajan bajo la base de tensegridad Fuller, un principio estructural basado en el empleo de componentes aislados comprimidos que se encuentran dentro de una red tensada continua, de tal modo que los miembros comprimidos (generalmente barras) no se tocan entre sí y están unidos únicamente por medio de componentes traccionados (habitualmente cables) que son los que delimitan espacialmente dicho sistema.
Así, los “brotes” se estabilizan por un sistema de cables de tensión en las puntas. La tensión y la compresión del sistema de la torre da una fuerza elástica para resistir las fuerzas del viento. Sus superficies triangulares se inclinan para reflejar la luz y convertirse en un plano singular y elegante, que entrega un mínimo de sombra.
Las nuevas torres de alta tensión también responden individualmente a su contexto natural y a las fuerzas. Los postes pueden inclinarse en la dirección de las fuerzas que los cables estén obligados a llevar, aludiendo a los árboles que “bailan” en el paisaje con el viento.
El baile de los postes encuentran su equilibrio estructural apoyándose en la curva de los cables eléctricos, que siguen las limitaciones del paisaje.
